Smash Bros Spain

Después de un largo fin de semana en la mansión de Peak toca hacer recuento de emociones pasadas, vividas con intensidad y con armagura a veces, pero siempre con la agradable sensación que proporciona la estancia en la mansión de Peak. Pero empecemos por el principio:

Nos dirigíamos en el coche de Peak hacia la mansión guiando a los santapoleros que iban en el coche de Giaa, que por cierto es high tier (el coche). El principio de la quedada no estuvo exento de percances, en el coche de Peak íbamos Madnesspaco, Cristian, Peak y yo, y a nuestra llegada encontramos a todos los smashers ansiosos por entrar. Pero además encontramos a un amigo random de Fotu subido a la verja de la mansión tocando uno de los farolillos y exclamando: "¡Esto se ha roto tio!", lo que provocó la ira de Peak, la risa de Madnesspaco y el "wtf" mio y de Cristian.

Esto no evitó que la quedada siguiera su curso. Era el turno de las presentaciones, allí estaban Borja y Alber, Borja con su alegría característica al ver a Madnesspaco, Alber, un tipo terriblemente educado y tímido, muy buen chaval, me has caído genial, un placer conocerte. Luego tocó conocer a Giaa y cía, aunque creo que sólo saludé a Giaa. Abrazo con Fotu y para dentro.

Nada más cruzar la puerta de la mansión te invade esa sensación de placer y ganas de vicio y hermandad, todo el mundo está de buen rollo, a Peak se le pasó el enfado por el percance y yo me preocupé por enfriar las cervezas que traíamos, cosa importante. Llega la hora de instalarse y enchufar wiis, teles y demás artilugios, y entonces caí en que había un ser de cuya existencia no me había percatado, quizá porque era algo bajito o porque el otro amigo de Fotu había destacado más en un principio por querer destruir la mansión antes de entrar. Ese ser fue una de las sorpresas de la quedada para mí, un gran tipo llamado Jesús, que desapareció el sábado por la mañana y no volvió a nuestras vidas, para conmoción de varios de los que acudimos.

El viernes por la noche fue genial, los santapoleros se integraron a pesar de que nadie sacó nocilla para compartir (le robé algo a Borja casi al final de la quedada, pero poco más). Jugamos a lobo, epic partida en la cual se oyeron diferentes frases como:

Después del lobo, algunos fueron cayendo por el cansancio y el sueño, otros aguantaron como cabrones hasta bien entrada la mañana siguiente, jugando al monopoly (hay gente temeraria en todas partes).

El día de sábado fue algo más tranquilo, llegaron nuevos smashers como Toño o Alfon y recibimos la lamentable noticia de que Arnold no podría acudir. Esto no fue tan grave como pudiera haber llegado a ser porque Giaa es una especie de versión 2.0 de Arnold, más cheto en la vida pero menos en el smash, osea que es una versión beta. Por la noche jugamos Crews y lobo, además de jungle speed y un juego random traído de la mano de Madnesspaco llamado "Resistance". Después de todo esto haré un recuento final de cosas buenas y malas de la quedada, para abreviar, aunque el tochopost está hecho.