- Dom Oct 04, 2009 9:48 pm
#20251
copy&pasta
En Estados Unidos causan furor los brazaletes que simbolizan las preferencias sexuales, que en algunos colegios ya han sido prohibidos
Una nueva forma de ligar, precisamente nada sutil, se extiende cada vez más rápido por Estados Unidos y comienza a llegar a Europa y España. Se trata de los «Jelly bracelets». Son unas pulseras de colores en las que cada color indica hasta donde está dispuesto a llegar, en materia sexual, el que la lleva.
En las escuelas americanas no es raro ver a niñas de todas las edades que llenan sus brazos de pulseras, muy parecidas a las que puso de moda Madonna en los años ochenta, sólo que esta vez sirven para identificar sus preferencias sexuales. La negra, la penetración; la azul, el sexo oral, la verde, el sexo con juguetes.
En Estados Unidos, la moda de las pulseras, incluso, ha derivado en un juego llamado «Snap». El chico que logra arrancarle una de estas pulseras a un chica consigue, como recompensa, practicar con ella el acto sexual que representa.
En algunos colegios de Estados Unidos ya las han prohibido. Los directores y profesores están muy preocupados por la generalización de complemento que consideran «peligroso». Los padres, en muchos casos, desconocen el auténtico significado de esas pulseritas «tan graciosas» que se venden en cualquier tienda de complementos de los centros comerciales.
Tal es la revolución que han formado estos complementos, que en algunos establecimientos hasta su nombre se ha modificado para pasar de ser «Jelly bracelets» -«jelly» significa goma o gelatina- a denominarse directamente «Sex bracelets».
De esta forma los adolescentes se comunican sin necesidad de palabras y eso les supone un morbo añadido. Ellos han creado un juego propio con estas pulseras como jugadores.
Además de los colores, existe una guía de conducta puesto que cuando un chico rompe la pulsera a una chica, significa que puede canjear el premio otorgado por su color, con esa chica. Este jueguecito es toda una moda que poco a poco se va prohibiendo, y no es raro ver chicas y chicos con brazaletes en muñecas o tobillos.
Los expertos alertan que en este tipo de prácticas la comunicación verbal del flirteo se pierde, ya que los jóvenes no necesitan hablar para conocer las preferencias sexuales de sus pretendientes. Además, insisten en que el juego puede acarrear muchos malentendidos y llegado el caso, situaciones muy violentas.
Además, no todos los jóvenes que compran las pulseras conocen su significado y sólo las lucen como un complemento más de moda. La moda del snap se está convirtiendo en un peligroso juego sexual.
En Estados Unidos la moda lleva registrada como leyenda urbana desde finales del 2003. La práctica ha alertado a padres y educadores e incluso ha protagonizado titulares en rotativos como el «New York Post».
Fuente: http://www.lne.es/galeria/2009/10/04/se ... 16531.html
En Estados Unidos causan furor los brazaletes que simbolizan las preferencias sexuales, que en algunos colegios ya han sido prohibidos
Una nueva forma de ligar, precisamente nada sutil, se extiende cada vez más rápido por Estados Unidos y comienza a llegar a Europa y España. Se trata de los «Jelly bracelets». Son unas pulseras de colores en las que cada color indica hasta donde está dispuesto a llegar, en materia sexual, el que la lleva.
En las escuelas americanas no es raro ver a niñas de todas las edades que llenan sus brazos de pulseras, muy parecidas a las que puso de moda Madonna en los años ochenta, sólo que esta vez sirven para identificar sus preferencias sexuales. La negra, la penetración; la azul, el sexo oral, la verde, el sexo con juguetes.
En Estados Unidos, la moda de las pulseras, incluso, ha derivado en un juego llamado «Snap». El chico que logra arrancarle una de estas pulseras a un chica consigue, como recompensa, practicar con ella el acto sexual que representa.
En algunos colegios de Estados Unidos ya las han prohibido. Los directores y profesores están muy preocupados por la generalización de complemento que consideran «peligroso». Los padres, en muchos casos, desconocen el auténtico significado de esas pulseritas «tan graciosas» que se venden en cualquier tienda de complementos de los centros comerciales.
Tal es la revolución que han formado estos complementos, que en algunos establecimientos hasta su nombre se ha modificado para pasar de ser «Jelly bracelets» -«jelly» significa goma o gelatina- a denominarse directamente «Sex bracelets».
De esta forma los adolescentes se comunican sin necesidad de palabras y eso les supone un morbo añadido. Ellos han creado un juego propio con estas pulseras como jugadores.
Además de los colores, existe una guía de conducta puesto que cuando un chico rompe la pulsera a una chica, significa que puede canjear el premio otorgado por su color, con esa chica. Este jueguecito es toda una moda que poco a poco se va prohibiendo, y no es raro ver chicas y chicos con brazaletes en muñecas o tobillos.
Los expertos alertan que en este tipo de prácticas la comunicación verbal del flirteo se pierde, ya que los jóvenes no necesitan hablar para conocer las preferencias sexuales de sus pretendientes. Además, insisten en que el juego puede acarrear muchos malentendidos y llegado el caso, situaciones muy violentas.
Además, no todos los jóvenes que compran las pulseras conocen su significado y sólo las lucen como un complemento más de moda. La moda del snap se está convirtiendo en un peligroso juego sexual.
En Estados Unidos la moda lleva registrada como leyenda urbana desde finales del 2003. La práctica ha alertado a padres y educadores e incluso ha protagonizado titulares en rotativos como el «New York Post».
Fuente: http://www.lne.es/galeria/2009/10/04/se ... 16531.html