El fútbol fue durante muchos años una parte muy importante de mi vida. Miraba todos los partidos, todos los análisis, me sabía las alineaciones, miraba tertulias, etc.  Absolutamente todos los días había fútbol en mi vida. Con amigos, con familia, para romper el hielo con desconocidos y gente de otros países… 

¿Por qué os estoy molestando con una etapa de mi vida que dejé atrás hace mucho tiempo, os preguntaréis? Pues bien. Estas semanas se ha dado una situación en la comunidad que veo demasiado interesante como para no debatir y en la que veo muchos paralelismos con mi etapa de fanatismo futbolero. Atended conmigo, todo cobrará sentido en un momento. Bien. Cumplidos los 18 años, se me abrieron las puertas a una nueva forma de vivir el fútbol. Una forma que me permitiría vivir aún más esta pasión que yo tenía, y si era lo suficientemente bueno, hasta ganar dinero. Sí, hablo de las apuestas.

Afortunadamente, no llegué a caer en ningún pozo del que me tenga que arrepentir y fue algo pasajero que se fue atenuando junto a mi interés por el fútbol; pero todos sabemos que no siempre será así para toda la gente y muchos caerán en la ludopatía. Sobre todo con las agresivas campañas de publicidad y aperturas de establecimientos de casas de apuestas. Ahora sí. ¿Cómo se relaciona esto con el Smash? 

El 14 de octubre vi un tuit de VGBootCamp que llamó mucho mi atención y que enseguida me llevó a recordar el periodo de mi vida antes mencionado:

Una exhibición al mejor de 11 entre los jugadores de alto nivel de Melee, Cody “iBDW” Schwab y Juan “Hungrybox” Debiedma, con nada más y nada menos que 5000 dólares de premio para el ganador, cortesía de BetUS, una casa de apuestas con sede en Costa Rica. Aparte, se te daba la posibilidad de apostar en la exhibición, como si de un partido de fútbol se tratara con sus cuotas correspondientes y todo.

En teoría, hay otra exhibición planeada para los top players de Ultimate entre James “VoiD” Makekau-Tyson y Brian “Cosmos” Kalu, pero no he visto publicidad al respecto, con lo cual no me extraña que no se hable del tema en la comunidad de Ultimate. Por una parte, estaba contento. Es una oportunidad para ver Melee de alto nivel, uno de nuestros jugadores será premiado con una buena cantidad de dinero y nos ayuda a atraer atención a nuestro juego. Aparte que, para bien o para mal, hace que la gente se implique más y lo viva más. 

La exhibición terminó con un contundente 6-2 a favor de iBDW, pero hoy no estamos aquí por eso. Más allá de la exhibición, las casas de apuestas traen consigo muchas implicaciones, que son las que quiero discutir en este artículo. Obviamente, en una escala tan pequeña, no creo que estos shows tengan un grandísimo impacto sobre nuestra escena. Tiene toda la pinta de que la casa de apuestas está tanteando el terreno y viendo si vale la pena extender el negocio más allá de un simple set al mejor de 11. 

En un futuro se podría apostar sobre qué jugadores van a hacer top 8 en cierto torneo, con algunos jugadores teniendo cuotas bajísimas pero otros con cuotas más altas; perfectos para los que más saben del juego, esos que ven regionales y conocen a las futuras promesas, los que son capaces de ver la bracket según el seeding y hasta cierto punto predecir un upset. Igual se pueden hacer apuestas en directo sobre la partida que se esté jugando, como por ejemplo la cantidad de stocks que serán quitadas; o en un mismo set, como por ejemplo si habrá una 4-stock o no.

Y es que el Smash no sería el primer eSport donde sucede una cosa similar. No es raro entrar en casas de apuestas y ver que puedas apostar en los juegos más grandes como el League of Legends, Counter Strike o Dota 2. Podría parecer que es inevitable que nos toque a nosotros, porque el Smash, a pesar de no mover muchísimo dinero, mueve una gran cantidad de audiencia siempre que hay torneos grandes, rivalizando con otros eSports más apoyados financieramente como Call of Duty.

Si al final las casas de apuestas deciden finalmente apostar por el Smash, tendrá ciertas implicaciones en la comunidad, lo cual igual que puede tener consecuencias ínfimas, puede tener tanto consecuencias positivas como consecuencias más que indeseables. ¿Qué cosas positivas nos puede traer? Pues lo que nos puede traer cualquier gran patrocinador: más dinero para la escena con lo cual nuestros jugadores pueden dedicarse más al juego y darnos más espectáculo; más atención a la escena y más gente implicada en el juego. Todo esto creo que ya nos lo imaginamos, no hace falta un doctorado para saberlo.

Las posibles consecuencias negativas, en cambio, sí que pueden ser más complejas y deberían ser analizadas. A grandes rasgos, obviamente, está el riesgo de que miembros de nuestra comunidad desarrollen ludopatía. "¡¿Pero, Xilio?! ¡La ludopatía la pueden desarrollar en cualquier parte! El Smash no tiene nada que ver". Sí y no. Es cierto que una persona que es propensa a la ludopatía puede desarrollarla hasta jugando quinielas, pero mucha gente no apuesta dinero porque no le atraen las opciones disponibles. A la gente a la que no le gustan los juegos de azar o el fútbol, por poner algunos ejemplos, pues no los verás en la ruleta del casino o en Bet365; pero la cosa cambia mucho, y claro que cambia mucho, cuando la apuestas están relacionadas con cosas por las que sienten pasión.





Antes ya dije que en el caso del fútbol no llegué a meterme en ningún pozo. ¿Pero sabéis dónde sí me he dejado mucho dinero? En micropagos de gacha en el móvil. No considero que caí demasiado hondo, pero se entiende mi ejemplo. Además, si una persona es propensa a desarrollar ludopatía, ya sea apostando al Smash o a las tragaperras, ¿significa eso que no nos debe importar y que no nos debemos preocupar por los miembros de la comunidad? ¿Que no debemos asumir la responsabilidad colectiva de evitar que algo así pase? Terreno gris, en mi opinión.

Y obviamente, en ambas escenas pero sobre todo en Ultimate, hay una población juvenil más que considerable. La normalización de las apuestas puede traer consecuencias graves en estos jóvenes, que siendo más influenciables (imaginad que top players empiezan a hacer publicidad de estas casas de apuestas en sus streamings, por ejemplo) podrían acabar viendo las apuestas no como algo que hay que disfrutar con responsabilidad, sino como lo vería un niño que desde los 14 años ya está dejándose la paga de los padres en "loot boxes". 

¿Estamos preparados para esa responsabilidad? Obviamente, los padres deberían hacer su parte también y controlar a sus hijos, pero en el mundo real no todo es como debería ser y no por eso hay que dejar que una persona se meta en un pozo que le va a traer miseria y tristeza. ¿Queremos que el Smash sea parte de los locales de apuestas en España? ¿Colocados delante de los centros de estudio, donde mucha gente joven va a pasar sus descansos apostando como si fuera lo más normal del mundo?

Pero para los más libertarios, defensores de que lo que hagan los demás no es tu responsabilidad y que si alguien se engancha "es su problema", os traigo otro problema: amaños. Si has seguido un mínimo los deportes, sabes de lo que hablo. La idea de conseguir mucho dinero sin esfuerzo llama la atención de gente que estaría dispuesta a sacrificar la integridad de la competición y los esfuerzos de la comunidad con tal de conseguir su objetivo.

Desde los inicios de Smash ya se hacían pactos entre jugadores para arreglar resultados; pero hay que decir que se hacía mayoritariamente porque muchos jugadores solo querían asegurarse ganar suficiente dinero para poder seguir viajando y compitiendo, no había mucho dinero en la escena y por eso no se tomaron acciones.

Pero esos tiempos quedaron atrás. Ya no son dos jugadores que acuerdan dividirse el premio para seguir viajando, hablo de casas de apuestas que mueven mucho dinero. La tentación de arreglar un resultado con el rival en top 8, apostando los dos a ese mismo resultado, puede ser muy grande como para dejarse pasar, suficiente como para renunciar a pasar de ronda. Total, ni siquiera tendrías que sacrificar el set, igual solo habría que acordar que en la segunda partida este jugador le hará un 4-stock al otro apostando los dos a ese resultado… ¿Y cómo podemos pararlos?

En los deportes se mueve mucho dinero, pero también hay una estructura que permite, hasta cierto punto, seguir estos supuestos amaños para defender la integridad de la competición. ¿Pero, nosotros? ¿Qué podríamos hacer? ¿Podríamos demostrarlo? ¿Entraría la justicia ordinaria a investigar estas irregularidades?

Y dispuestos a ser pesimistas… ¿Queremos llamar la atención de la gran N? ¿Qué pensaría Nintendo, una empresa que ya sabemos que es más cabezona que una abuela que te ha invitado a comer, de un país donde las apuestas ya están muy regularizadas hasta el punto donde muchos torneos son sin premio monetario, y que ya es reacia a aceptar la existencia de una escena competitiva? Porque los juegos anteriormente mencionados están apoyados activamente por sus desarrolladores, lo que además también refuerza el punto anterior, son una autoridad.

Está claro que en este artículo he tomado una visión muy extrema respecto al asunto, tal vez catastrófica y todo. Al final las cosas se podrían hacer bien y sería un empujón hacia adelante muy bueno para nuestra escena, y creo que las apuestas de modo responsable ayudan a disfrutar aún más el juego que amamos; pero a la vez soy de la opinión de que las casas de apuestas no deberían tener permitido hacer una publicidad muy agresiva, lo cual iría contra sus intereses.

Igual esto es una cosa puntual y aquí se acaba el periplo de las casas de apuestas en nuestra escena, pero también os escribo para que penséis y reflexionéis, que no todo lo que brilla es oro.