Sé que es un titular algo abstracto, pero enseguida me entenderéis.

Durante estos dos largos años de pandemia hemos vivido muchos momentos difíciles no solo en nuestro día a día, sino en la propia escena de Smash española. El COVID-19 nos ha traído muchos desafíos como comunidad, y si hemos logrado salir adelante, ha sido gracias a esas personas que, en algún momento (sí, me incluyo), hemos decidido dar un paso al frente para llevar iniciativas adelante o poner temas de debate sobre la mesa.

De hecho, echando un vistazo rápido atrás, como ya predije en mi última columna, publicada el pasado 20 de marzo, llevamos ya más de un mes sin restricción alguna que pueda aplicarse a nuestros eventos. Pero no vamos a adelantar acontecimientos: como diría Jack el Destripador, vayamos por partes.

Cuando la pandemia estalló, todos los torneos presenciales se cancelaron de inmediato. Bueno, mentira: llevábamos varios meses de pandemia, con contagios masivos y numerosos fallecidos, pero no cancelamos nada hasta que el Gobierno nos dijo lo que estaba pasando (a pesar de que los medios de comunicación llevaban tiempo avisándolo). 

De un día para otro, nuestra situación como comunidad dio un vuelco: de repente, la escena era online. Y gracias a un grupo de personas con ganas, la escena no solo no murió, sino que gozó de cierta salud. Los Streamers SBS siguieron creando torneos, eventos y directos que hicieron que, paradójicamente, personas que están muy lejos las unas de las otras estuvieran más cerca que nunca en unos momentos en los que uno no podía ver al amigo con el que jugaba cada día. Todo ello sin olvidar el importante papel (a veces olvidado) que llevamos a cabo los redactores de Smash Bros. Spain, que (os recuerdo) también creamos contenido, aunque sea en formato texto.

Ese grupo reducido de personas que decidió crear contenido y organizar torneos fue el que mantuvo con vida la comunidad. La función de crear eventos pasó de los TO habituales... a los TO online. Pero eso, consigo, trajo un problema: al masificarse los torneos online, en todo el globo quedó más clara que nunca una carencia enorme que seguimos padeciendo: el terrible online de Nintendo. Y sí, muchos estamos pagando por esa basura.

Durante esos meses de pandemia, numerosos discípulos de Satanás (¿os acordáis? Buenos tiempos) empezaron a competir en torneos online sin usar cable. Y se resistían a gastarse cerca de diez euros en un triste adaptador a pesar de que estaban pagando 20 euros anuales por el online y que muchos de ellos habían comprado los DLC del juego. En esa tesitura yo publiqué la famosa "columna del cable". Y no hace falta que os cuente la historia: me convertí en un meme a partir de ese día y también de la noche a la mañana en una de las figuras más controvertidas de la comunidad. Sin embargo, tras casi dos años después de su publicación, la realidad se ha acabado imponiendo: al final, aquellos sinvergüenzas se sintieron más señalados que nunca y la presión social hizo que incluso aquellos irreductibles galos acabaran pasando por el aro y se compraran el adaptador para usar cable. Y ahora, desde hace casi un año, raro es el torneo en línea serio en el que el cable no sea obligatorio, y aquellas personas que no lo usan son, finalmente, la gran minoría.

«De no ser por un grupo de valientes que aceptaron tragar flame, los torneos presenciales habrían tardado mucho más en llegar»

Y luego, con el paso del tiempo, entre la evolución natural del virus, la llegada de las vacunas y la adaptación del sistema sanitario a la pandemia, llegó un debate necesario: ¿y cuándo debían volver los torneos presenciales?

Los eventos deportivos y los torneos de otros e-sports estaban regresando de forma paulatina, y de hecho las restricciones y recomendaciones del Gobierno habían empezado a cambiar. El mensaje era claro: se podía empezar a valorar la posibilidad de organizar torneos. Pero claro, alguien tenía que dar el primer paso, ¿no?

Mi comunidad, Smash Bros. Mallorca, fue una de las primeras primeras escenas en atreverse, en pleno verano de 2020, junto con Córdoba. Luego, tras un parón, vino Smash Aragón, así como Mystic Squad eSports. A pesar de los comentarios, las quejas y las críticas, esos torneos salieron bien, demostrando que los valientes detrás de esas decisiones habían obrado de forma correcta. Y de no ser por ellos, que fueron osados y aceptaron tragar todo ese flame, los torneos presenciales habrían tardado mucho más en llegar. Tampoco podemos olvidar la atrevida y necesaria organización del Glory Summer, un torneo nacional en verano de 2021. De nuevo, esos valientes demostraron que alguien debía dar el primer paso, independientemente de las críticas. Y fue posible gracias a ellos.

Finalmente, cuando yo recomendé que cada jugador llevara la mascarilla como quisiera dado que los indicadores pandémicos eran buenos y teniendo en cuenta que en los países de nuestro entorno ya se habían retirado, también se lanzaron numerosas críticas sobre mí, aunque esta vez llegaron más allá: algunas personas no solo me insultaron, criticaron o amenazaron, sino que se inventaron mentiras sobre mi persona para minar mi "reputación" (me sigo riendo todavía). Y exactamente DÍAS después de su publicación se anunció su completa retirada en interiores, que se hizo efectiva en exactamente un mes después de la publicación del texto.

Y aquí estamos hoy.

Aquí estamos hoy, sí. La pandemia ha terminado y hemos llegado al final de este largo camino. Y no porque lo diga yo, porque lo digan los médicos o los indicadores epidemiológicos, sino porque los políticos así lo han decidido. Y sí, gente, es ironía, que a estas alturas parece que hay que decirlo. Por ello, el tiempo ha puesto a cada uno en su lugar. Y no hablo solo por mi caso personal o por los que me han criticado a mí o a otros TO, sino por todos los valientes de toda la comunidad de Super Smash Bros. española que han decidido dar el paso, tomar decisiones, hablar y actuar cuando los demás se resistían a hacerlo. A todos vosotros: gracias.

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