La comunidad de Smash en España es claramente más grande que nunca, en gran parte debido al éxito tanto de la Nintendo Switch como de Super Smash Bros. Ultimate. Ahora bien, detrás de este crecimiento, hay un segundo grupo de responsables, los jugadores. No importa cómo de bueno o malo sea un juego: al final, el factor definitivo de si un juego tiene comunidad activa o no es que la gente juegue; mientras haya gente jugando, la comunidad vivirá.

En nuestro caso tenemos jugadores de sobra, así que vamos bien en el departamento más importante. Algunas comunidades tienen hasta el lujoso problema de llenar siempre los torneos y que se quede gente fuera. Eso sí, este crecimiento conlleva más responsabilidades, y en el caso de Catalunya, que es donde compito, he vivido las consecuencias de esto.

La demanda de torneos de Ultimate en Barcelona fue suplida con más oferta, con un torneo cada fin de semana, a veces dos incluso. Esto convirtió rápidamente a Catalunya en una de las comunidades más fuertes en España, formando a jugadores de alto nivel y creando una de las comunidades con más densidad de participantes. Todo parece muy bonito a primera vista, pero este progreso se demostraría al poco tiempo muy poco sostenible.

Un hecho importante que a veces se nos olvida es que nadie se gana la vida con esto y la gente que colabora para hacer crecer la comunidad de Smash lo hace por pura ilusión de jugar a su juego favorito y compartirlo con otros jugadores. Ser organizador puede ser muy gratificante por el hecho de ver a la gente pasarlo bien, pero si al final los sentimientos de frustración y ansiedad superan todos los factores positivos que traen los torneos y muchas de las responsabilidades consisten en tareas objetivamente poco interesantes como subir vídeos a YouTube o llevar televisores a los torneos cada semana, fácilmente vemos esa ilusión desaparecer poco a poco. El ritmo no se aguanta y varios organizadores dejan de serlo durante un tiempo o permanentemente.

A lo que quiero llegar con esta historia es que si queremos que el Smash vaya a más en España, o directamente, que no vaya a menos, hace falta la colaboración de todos. A día de hoy hay unos pocos que mantienen todo a flote, ya sea con torneos, contenido u otros esfuerzos, pero cada vez tenemos una comunidad que pide y necesita más y unos voluntarios con los mismos recursos limitados.

«Ser organizador puede ser muy gratificante por el hecho de ver a la gente pasarlo bien, pero si al final los sentimientos de frustración y ansiedad superan todos los factores positivos, fácilmente vemos esa ilusión desaparecer poco a poco»

Dicho esto, este artículo no va de pedirle a nadie que se haga organizador. Sí, los números no son perfectos y estaría genial tener más, pero ese no es el principal problema. Lo que quiero decir es que la comunidad de Smash es de todos y por ese motivo nos corresponde a todos cuidarla. No todo el mundo puede o quiere ser organizador, pero no es lo único que nos hace falta. Muchas veces faltan comentaristas o encargados de stream, que los organizadores se vuelven locos para buscar gente que pueda encargarse o al final acaban doblando ellos mismos a ese trabajo también.

Siempre hacen falta capitanes de pool, voluntarios para montar consolas y televisores, más presencia en redes sociales, alguien que ayude a subir vídeos a YouTube, artículos, entrevistas u otro tipo de contenido sobre los torneos, etcétera. La lista de formas de ayudar no tiene límite y al final hasta algo tan simple como dar visibilidad a los eventos o a diferentes comunicados de los organizadores con un retuit está ayudando a que estos torneos vayan a más.

Hay que recordar que si todos nos limitamos a jugar, el juego seguirá vivo, sí, pero la comunidad no será la misma. Sin eventos se pierde el interés por el juego y se pierde el vínculo que une a muchos jugadores. Por este mismo motivo, si ya lleváis un tiempo en la comunidad haceos esta pregunta: ¿qué puedo hacer? Y si no se os ocurre nada, siempre podéis preguntarle a un TO de vuestra zona, que con total certeza sabrá cómo podéis ayudar.